La Gran Manzana en Navidad es mágica y vale la pena vivir de cerca la experiencia. Te proponemos rutas y eventos para disfrutar en familia. Los pequeños lo agradecerán
Nueva York siempre es un viaje con mayúsculas pero en Navidad, y con niños, es una experiencia inolvidable. El espíritu de esta fiesta se respira a cada paso, hay luces por doquier, escaparates que parecen salidos de cuentos, pistas de hielo, aceras llenas de abetos y… ¡cientos de planes que hacer! Y sí se tiene suerte y nieva… no, no es una escena de película, es ¡La Gran Manzana en Navidad! y tiene mucho que ofrecer. Pero no siempre se puede llegar a disfrutar todo. Por eso os proponemos una lista de experiencias imprescindibles que hay que hacer para disfrutar en familia.
1. Visitar el gran árbol del Rockefeller Center
No puedes decir que has ido a Nueva York en Navidad si no has visitado el gran árbol del Rockefeller Center. Es el punto de partida para regocijarse de la magia navideña y que los niños disfruten. Su encendido, con más de 50.000 luces LED, marca el inicio de la temporada navideña y cada día permanece iluminado desde las 6.00 de la madrugada hasta la medianoche, con la excepción del 25 de diciembre, que lo está las 24 horas. El gigantesco abeto mide 25 metros de altura y está coronado con una estrella formada por 3 millones de cristales de Swarovski. Y si le sumas la pista de patinaje, que se instala a sus pies (te explicamos más abajo en detalle), ¡la experiencia navideña está asegurada!
- Ubicación: Midtown de Manhattan, 45 Rockefeller Plaza, entre las calles 48 y 51 y las avenidas Quinta y Sexta.
- Más detalles: Aquí
- Otros árboles que ameritan una visita (si tienes tiempo): El árbol de navidad y el pesebre barroco napolitano en The Met Fifth Avenue, el de la Bolsa de Nueva York o el del hotel Plaza.
2. Patinar sobre hielo en sus tradicionales pistas
Un plan familiar y muy navideño. Patinar sobre hielo es de lo más divertido y si con suerte cae nieve ¡de película! Os dejamos algunas pistas donde poder entrenar giros y piruetas con los más pequeños (en algunas hasta os podéis apuntar a unas clases rápidas):
- Pista de patinaje en el Rockefeller Center: para patinar junto al mayor árbol de navidad y si está iluminado ¡mejor! Es de pago (de 40-60 minutos) Abierta hasta marzo de 2023. Es muy recomendable reservar en su web con antelación.
- Pista de patinaje en Bryant Park: es la única de entrada gratuita en la Ciudad de Nueva York. Si no tienes patines se pueden alquilar a partir de 18 €. Hay que hacer reserva previa en la web. Un buen momento para ir con niños pequeños es antes de las 11, de lunes a viernes, y antes del mediodía los sábados y domingos ya que las ayudas para patinar son gratuitas. Abierto hasta el 5 de marzo de 2023. Además, a su alrededor hay un mercado navideño.
- Pista de patinaje Brookfield Place: ubicada en la parte sur de Manhattan. Hay sesiones desde 14€ y el alquiler de patines desde 5€. Se recomienda hacer una reserva previa en su web.
- Otras pistas: también puedes encontrar otras opciones como la recién inaugurada Governors Island o la Vale Rink en el hotel The William Vale (con vistas al skyline de Nueva York de fondo).
3. Pasear por los mercadillos o recorrer el barrio Dyker Heights
Navidad en Nueva York es una experiencia que los niños y adultos recordaréis siempre, sobre todo si también visitáis sus mercadillos repartidos por toda la ciudad, donde todo parece de postal y donde en encontraréis una gran variedad de souvenirs bonitos, ropa, y artesanía, y ¿lo mejor? degustar un buen rollo de canela, una variedad de dulces navideños o un apetecible chocolate caliente. Entre los que más merece la pena ver están: el mercado de Bryant Park, el Grand Central Terminal (que es el único mercadillo que está bajo techo y está ubicado en un edificio histórico de fama mundial), o el mercado de Navidad de Union Square, donde los objetos artesanales cobran protagonismo.
Otra alternativa que no debes dejar de hacer es recorrer el famoso barrio Dyker Heights, donde los vecinos de este barrio de Brooklyn, desde hace más de 30 años, organizan una peculiar competición para elegir la casa mejor decorada. Pasa por ser el barrio con más luces de Navidad del mundo. Realizar el paseo mientras te tomas un chocolate caliente os ayudará a impregnaros del espíritu navideño al cien por ciento.
4. Apúntate a algún evento navideño
Nueva York está inundada de espíritu navideño por donde se lo mire. Y eso se traduce en actividades por doquier para disfrutar. Os apuntamos algunos eventos de temporada que son de visita obligatoria:
Espectáculo de trenes navideños: el Holiday Train Show de NYBG es una de las tradiciones favoritas de los más pequeños y se desarrolla en el Jardín Botánico. Esta exhibición de maquetas de trenes muestra más de 190 réplicas de lugares emblemáticos de Nueva York que han sido creadas con materiales naturales como corteza de abedul, vainas de loto o palitos de canelas. Y por si fuera poco se vuelve más mágico cuando miles de luces iluminan los jardines creando un espectáculo único.
La Fábrica de Papá Noel en el multiverso: por si os apetece alejaros de las calles y sumergiros en un universo navideño virtual, Spectacular Factory: Holiday Multiverse os brinda la posibilidad de interactuar con cascanueces, bastones de caramelo o campanas gigantes en una experiencia inmersiva diseñada por el innovador estudio Artechouse. Un viaje a otra dimensión de la Navidad ¿os atrevéis?
Espectáculo musical en Broadway: otra cita obligatoria y más en esta temporada. Pero si vais en Navidad y con niños, el Christmas Spectacular de The Rockettes es, sin duda, el más importante.
Apuntes importantes si viajas con niños:
→ No olvides verificar fechas y horarios de las atracciones y eventos (algunos trayectos son largos y puede resultar agotador)
→ Asegúrate de llevar un seguro de viaje para Estados Unidos. ¡Muy importante!
→ Nueva York invita pasear por sus calles. Pero es más fría que cualquier gran ciudad española en diciembre. Hay que abrigarse bien, y usar ropa ropa térmica. No hay que descuidar el calzado y también debe pensarse en la posibilidad de que llueve. En un clima así hay que cuidar de los niños, que serán los primeros en olvidarse de la temperatura y disfrutar de todo lo que se les ofrece.